¿Cómo evitar que su perro se rasque todo el tiempo?
Las pulgas, la humedad y la comida son algunas de las causas por las que su mascota puede tener un problema en la piel.
Por esta razón, el cepillado frecuente y el baño son claves para prevenirlos; al ser tratados con tiempo, no tienen ningún problema.
“La rasquiña constante, el pelo opaco o su caída, o el enrojecimiento de la piel son señales de que algo está pasando”, explica Ana Milena Carmona Gil, veterinaria especialista en dermatología de pequeños animales, quien asegura que la piel es un indicador del estado de salud general de las mascotas. “Otra cosa que puede incidir es su estado nutricional. Por eso hay que darles concentrados de buena calidad, que deben permanecer bien almacenados”, asegura Carmona.
Acá, algunos padecimientos comunes.
Cuidado con lo que come
Las alergias a los alimentos en los perros pueden ser por factores genéticos. Pero el animal puede incluso desarrollar intolerancias a lo que ha comido siempre.
La hipersensibilidad afecta más a algunas razas que a otras. Este padecimiento es difícil de diagnosticar porque hay que descubrir el agente externo o componente del alimento que genera la reacción.
Pulgas, garrapatas y ácaros
Estos bichos son los responsables de la mayoría de los problemas dermatológicos. La alergia más consultada a los veterinarios es a las picaduras de pulgas.
Por eso, cuando el perro se rasca desesperado o más de lo normal, hay que aplicarles productos para su control.
Los síntomas son enrojecimiento, costras y heridas en cara, axilas, ingles, orejas y cuello. A veces se presenta con caída del pelo, manchas y heridas en la piel.
Con estos síntomas, los perros lo pasan mal; pueden estar ansiosos, nerviosos, irritables o decaídos. Para prevenirlo se deben aplicar los productos una vez al mes o según las recomendaciones médicas. Baño y cepillado son importantes para su salud.
Esto que huele mal
Un síntoma muy molesto es el mal olor, que generalmente es ocasionado por hongos y bacterias (algunas veces se localizan en las uñas, la piel o el pelo del animal), y que afectan su sistema inmune.
Los perros que se mojan continuamente y permanecen húmedos pueden desarrollarlo, así como los que duermen en un espacio mal ventilado.
Los hongos pueden originar inflamación, pedazos del cuerpo pelados con escamas y la caída del pelo, entre otras lesiones importantes, que si no son tratadas a tiempo pueden contagiarse a los humanos, sobre todo a los niños.
Las infecciones por hongos pueden presentarse de dos maneras: superficiales y profundas, y se tratan dependiendo del daño que hayan causado estos microorganismos en la piel del perro.
Un experto en este tipo de enfermedades dará el tratamiento adecuado.
¿Cómo prevenirlos?
Con un buen control de parásitos externos e internos, cepillado regular, nutrición balanceada y concentrados de buena calidad.
Al menor síntoma, consultar al veterinario.
Tomado de El Tiempo
